huevos cocidos con hongos

Compré huevos orgánicos y los estoy disfrutando. Si bien suelo utilizar huevos una o dos veces por semana no los como directamente sino en otras preparaciones. Sin embargo los huevos orgánicos, de yema naranja, me parecen deliciosos y por eso he probado esta receta y planeo repetirla mañana por la mañana, para comenzar el sábado con un mimo gastronómico.

Ingredientes de huevos cocidos con hongos

  • 4 huevos orgánicos
  • 4 dientes de ajo
  • 3/4 taza de aceite de oliva extra virgen
  • 4 cucharadas de mantequilla
  • espinaca hervida
  • pimienta negra
  • 1/3 taza de nata
  • cualquier hongo que te guste picado grueso
  • 1 pan bagette

Preparación de huevos cocidos con hongos

El ajo es, además del huevo, el ingrediente estrella de esta receta. En este caso lo cocinaremos confitado: calientas el aceite en una sartén a fuego medio, agregas dos dientes de ajo y cocinas revolviendo de vez en cuando hasta que se ablande, unos 15 minutos. Con una cuchara retiras después los ajos a una tabla de picar y dejas enfriar.  Después cortas a lo largo, fileteando.

Aparte mezclas dos cucharadas de mantequilla en un cazo sobre el fuego hasta que espume. Agregas las espinacas y cocinas revolviendo poco, unos 6 minutos. Sazonas con sal y pimienta y llevas la espinaca a un paño, para exprimirla bien. Reservas la verdura. La mantequilla que queda la llevas al cazo sobre el fuego, agregas 1 diente de ajo y los hongos, sazonas y cocinas. Agregas después la nata y cocinas 5 minutos más. Retiras del fuego, cubres y dejas los hongos en remojo 15 minutos. Deshechas el ajo.

Calientas el horno a temperatura fuerte. Divides la espinaca y los hongos en cazuelas, agregas el ajo fileteado y confitado, rompes un huevo en cada cazuela y las ordenas sobre una fuente de horno.  Cocinas a Baño de María y cubres las cazuelas con papel de aluminio. Cocinas hasta que las claras estén cocidas y las yemas todavía no se hayan cocinado del todo o a tu gusto. Calcula unos 10 minutos. Mientras tanto puedes tostar el pan y pintarlo con el ajo que queda, para saborizarlo. ¡Voila! Ya tienes un desayuno sabroso para empezar con una sonrisa el fin de semana. O eso pienso hacer yo.