Cuando pensamos en cocinar pensamos automáticamente en horno y sartenes con aceite. Es así y no hay dudas de que la comida elaborada con estos método de cocción es más sabrosa, pero muchas veces no es el mejor camino para lograr una comida sana. Es decir, en la senda de la salud hay algunos sacrificios que debemos hacer y uno de ellos incluye empezar a dejar de lado métodos de cocción que aportan calorías y grasas a los alimentos.
Los japoneses utilizan con frecuencia el vapor a la hora de cocinar sus vegetales y lo cierto es que éste es uno de los métodos mas simples, naturales y sanos para que los alimentos se cocinen y no pierdan en el proceso vitaminas, colores y minerales. Conservan además sus aromas, así que hay que animarse. Para hacerlo, bien podemos usar una vaporera eléctrica (forma parte de la lista de casamiento de toda japonesa), una cacerola especial, un canasto de bambú o simplemente el colador con una tapadera.
El método consiste en que el recipiente mayor contenga agua que no toque los alimentos contenidos en el recipiente de menor tamaño (el colador dentro de la cacerola o el recipiente de bambú). Ponemos la tapa y el vapor que emana del agua caliente va cocinando los alimentos. Se tarda más, pero si hay tiempo es lo mejor. El vapor debe circular libremente en el interior del recipiente para que todo se cocine en forma pareja y quien dice que la comida al vapor no tiene sabor o no puede sazonarse está equivocado pues podemos agregar especias o vino al agua.
Consejos: coloca piedras en la cacerola para que cuando hagan ruido te des cuenta que se ha evaporado el agua y necesita más, dispón los vegetales de tallos gruesos abajo y los de hojas tiernas arriba de todo, y si vas a cocinar carne y verduras, primero cocina la carne y cuando esté un poco cocida le agregas las verduras.
Estoy encantada con la cocina al Vapor.
Desde siempre que hemos cocinado la verdura hervida en mi casa y se me atragantaba siempre el pensar que debía comérmela. Lo que no me gustaba de la verdura era esa cantidad de agua que absorben los alimentos cuando los hervimos, esa sensación de estar comiendo una burbuja de agua envuelta en hojas de palmera. Desde que cocino al vapor, ya nada sabe a agua, las espinacas saben a espinacas, las judías a judías, los garbanzos saben a los que hacía mi abuela, los huevos están mejor que fritos, y un largo etc …
Recomiendo este aparato 100%. Y desde luego que es comodisimo de usar y limpiar.
Todo son ventajas, además sabes que estás comiendo los alimentos frescos y que ninguna propiedad se va a ir con el agua que escurres.
Saludos.
1-02-2010