Semillas

Hoy en día se comen muchas semillas pues se han redescubierto sus propiedades, pero algunos de nosotros las consumimos mal y de esta manera las desaprovechamos. ¿Cómo es esto? Sí, no se trata solo de comprar semillas, guardarlas en un frasco y colocarlas en las comidas. Hay que darles una vuelta de tuerca, sino nuestro organismo no podrá sacarles real provecho.

Lo cierto es que hay que activar los granos, legumbres y semillas para que nuestro organismo pueda digerirlos mejor y, por ende, absorber los nutrientes que estos elementos contienen. Una buena manera de activarlos es dejarlos en remojo para ablandarlos y acceder a sus beneficios. Se trata simplemente de colocarlos en un bowl con el doble de su volumen en agua fría. Cubrimos y dejamos a temperatura ambiente durante un lapso de entre ocho o doce horas, o toda una noche. Después pasamos por el colador, enjuagamos y secamos antes de utilizar.

Si no vamos a utilizar esto inmediatamente podemos colocar en un tupper y durante tres días dura bien el el refrigerador, pero deberemos enjuagar de nuevo antes de usar. No todas las legumbres, frutos o semillas deben remojarse antes, los pistachos o piñones, no, los anacardos necesitan muy poco tiempo, apenas dos o tres horas aunque hay que tener presente que las legumbres siempre necesitan al menos doce horas.

Por su parte, los pseudo granos como el amaranto o la quínoa, además de agua necesitan un elemento ácido en ella así que hay que agregar un poco de vinagre de manzana o zumo de limón. Es importante que tengas en cuenta estos consejos porque sino tus legumbres, semillas y frutos secos no te podrán brindar lo mejor de ellos.