huevos

La idea general es que el huevo no es bueno para la salud, ¿no es cierto? Pero me parece que la mala fama del huevo se debe a que suele formar parte de guarniciones llenas de grasa: huevos con panceta frita, huevos fritos, huevos con patatas fritas y la lista de estas delicias grasosas es infinita. ¿Pero el huevo en sí es malo?

Bueno, el huevo tiene una gran cantidad de vitamina A, B, D y E, hierro, fósforo y potasio. Hay algunos vegetarianos que aceptan comer huevo y se ha demostrado que entre este grupo hay menos casos de enfermedades coronarias y de arteriosclerosis, así que después de todo no creo que siempre se deba rechazar al pobre huevo. Es hora entonces de no relacionarlo inmediatamente con las calorías y las grasas, pero para eso es necesario cocinarlo de la forma mas sencilla posible: pasados por agua, escalfados, duros, en cocotte, y demás.

Es la manera más sana de cocinar el huevo ya que la cocción solo implica agua hirviendo y calor sin ningún elemento graso. Casi no se aportan calorías o grasas y se conserva el sabor del producto. Eso sí, lo mejor es sacar del frigorífico los huevos que vayan a utilizarse por lo menos media hora antes ya que hay que cocerlos estando a temperatura ambiente. De esta forma no se rompe la yema, por ejemplo.

Bueno, es hora de volver a comer huevo sin culpas.