Rollos de canela

En el hemisferio norte hace frío y es la mejor temporada para comer cosas sabrosas. En la pastelería es difícil encontrar algo que sea muy sano pues todo lleva mantequilla, chocolate, huevos, nata, pero de vez en cuando podemos darnos algún lujo. ¿Te gusta la canela? Yo creo que uno de los mejores platos dentro de la pastelería con canela son los cinnamon rolls, los rollos de canela. Me encantan.

En casa la canela no gusta mucho así que jamás hago nada con canela, pero cuando salgo a tomar el té con amigas siempre pido algo con esta sabrosa y única especia. Y los rollos son geniales así que de tanto en tanto los hago en casa. Hay mil variantes, con pasas, con chips de chocolate, con frutos secos, pero a mí me siguen gustando los rolls clásicos. Y esta es mi receta de estos rollos que nacieron en Suecia pero son tremendamente populares en Estados Unidos:

Ingredientes de los rollos de canela

  • 5 tazas de harina
  • 4 huevos
  • 1 taza de leche a temperatura ambiente
  • 2 cucharadas de levadura seca
  • 100 gramos de mantequilla blanda
  • 1 pizca de azúcar
  • 2 cucharaditas de sal
  • azúcar negra
  • 1/3 taza de leche tibia

Para la cobertura

  • azúcar glasé
  • leche
  • esencia de vainilla (opcional)

Preparación de los rollos de canela

Primero diluimos en un bowl las dos cucharadas de levadura seca con 1/3 de leche tibia. Le agregamos el azúcar y dejamos reposar hasta que espume la preparación.  En otro bowl volcamos las tazas de harina y armamos una corona. Dentro colocamos tres huevos, la mantequilla pomada, la sal y la levadura diluida. Tomamos la masa desde el centro hacia afuera y a mediada que la masa se va formando vamos agregando 1 taza de leche más, poco a poco, hasta darle forma a un bollo.

Dejamos levar ese bollo hasta que duplique su volumen. Después pasamos a la mesada y desgasificamos. Estiramos la masa hasta formar un rectángulo y pintamos con un poco de mantequilla pomada la superficie. Espolvoreamos con la canela y el azúcar negra y enrollamos. Cortamos en rodajas de alrededor de 3 centímetros y las colocamos en una placa de horno, enmantecada o con rocío vegetal, un poco alejadas entre sí porque crecen en el horno.

Pintamos con huevo batido (opcional), y van al horno por 15, 20 minutos. Una vez fuera y tibias podemos cubrir con el glaseado.