yogur

Una de nuestras funciones corporales más importantes es la digestión. Una buena digestión impide la acidez, los problemas gástricos y la correcta evacuación de lo que el cuerpo ya no necesita. Suena simple, sencillo, pero para millones de personas no lo es. Para lograr un buen funcionamiento de nuestras funciones digestivas lo mejor es conocer lo bien que hacen dos elementos esenciales: los probióticos y los prebióticos.

  • Probióticos:  aparecen en las publicidades de yogur desde hace años. Son microorganismos que no solo ayudan a la digestión sino que nos protegen de las malas bacterias. Influyen positivamente en la función del colon, bajan el riesgo de cáncer, reducen inflamaciones, combaten las alergias y previenen infecciones. Los probióticos están presenten en la comida fermentada, yogur especialmente, o pueden ingerirse como suplemento.
  • Prebióticos: de ellos se alimentan los probióticos. Son el alimento de nuestra flora intestinal. Se trata de carbohidratos no digeribles que ayudan al crecimiento de las bacterias buenas dentro del sistema digestivos. No son microorganismos y sus beneficios sobre la salud son indirectos, ya que refuerzan la flora y la presencia de los probióticos. Los puedes encontrar en las bananas, las cebollas, la miel, los granos, endivias/achicorias, etc.

Estos dos elementos de nuestro sistema digestivo tienen roles muy importantes en un buen funcionamiento de nuestra salud. Forman un dúo dinámico insuperable y refuerzan nuestro sistema inmunológico.