Yogur

Comer sano es la tendencia en nutrición, pero en verdad comer sano en el siglo XXI es algo difícil pues estamos viviendo un imperio de la comida industrial. Entonces, comer bien cuesta cada día más: en tiempo y en dinero.

¿Pero cuáles son los alimentos del siglo XXI que deberíamos tener en cuenta? Pues los siguientes están marcando tendencia:

  • Probióticos: aparecieron en el mercado de lácteos hace un par de décadas y después de la fama inicial casi que desaparecieron. Se trata de bacterias buenas presentes en el intestinos, hay como 400 tipos, cuyos roles siguen estudiándose desde la ciencia. El yogur, común y para beber, la leche con probióticos agregados, la leche fermentada o el kefir, por ejemplo, son opciones. El kimchi coreano o el sauerkraut, vegetales fermentados, también son ricos en probióticos.
  • Ácidos Grasos Omega 3: estos ácidos beneficiosos se encuentran en las judías de soja, frutos secos, ciertos pescados y semillas de lino. Se trata de grasas polisaturadas que son buenas para la salud mental, los huesos y los intestinos.
  • Yogur: como cuando eramos niños. Los yogures bajos en azúcar o naturales son la mejor opción para comer solos o para suplantar la nata o el queso de untar.
  • Vegetales verdes: hablo de espinaca, acelga, col verde (también llamado berza o col crespa), repollo, etcétera. Tienen color, tienen textura y mucho sabor además de vitaminas, minerales y fibras.
  • Granos integrales: una dieta equilibrada tiene de todo un poco así que puedes comer productos integrales en su justa medida. Galletas, panes, cereales, arroz integral, incluso pasta. Son energía para el cuerpo, mucho más si eres alguien activo.
  • Fibras: no faltan en mi casa, las mezclo siempre con el yogur. Hay muchos tipos y todas son beneficiosas porque controlan el nivel de azúcar en sangre y mantienen el buen funcionamiento de los intestinos.
  • Carne: por favor, que no falte en tu dieta. Si bien es mejor comer más vegetales que carne tampoco tenemos porque anular la carne de vaca, de cerdo o pescado. No mucho, no como plato principal.